Dra. Sarita Rodríguez,
Ph.D. Psicología Industrial Organizacional
Cuando hablamos del tema de liderazgo podemos encontrar un sinnúmero de definiciones científicas para este concepto. Yo lo defino como una persona que tiene las características y capacidades para ejercer un puesto, en el cual conoce las funciones y no tan solo se dedica a dar órdenes si no que también considera ofrecer ayuda para realizar la tarea dada.
Sin embargo al hablar de este tema una controversia salta a nuestra vista. Esta nos hace cuestionarnos sobre si estos líderes nacen o se hacen. En mi opinión personal pienso que todos podemos aprender sin importar si tenemos condiciones o no. Menos hoy día donde la tecnología juega un papel tan importante en nuestras vidas. Esta nos ayuda a darnos cuenta de que todos podemos tener un aprendizaje de alguna manera ya sea a través de dibujos, películas escritos o usando otras herramientas donde el fin sea comprender lo que se está enseñado.
Pero a veces cuando veo situaciones como por ejemplo en la política o en las empresas donde aparecen personas que tienen grandes puestos y son unos letrados en ciertas áreas y piensan que son unos grandes “lideres”. Pero en vez de mostrarlo en la práctica laboral ellos hacen todo lo contrario donde toman decisiones no muy sabias y sus hechos no parecen ser muy bien vistos. Además de que cuando se entrevistan a sus empleados o seguidores ellos afirman que esos que se creen lideres no saben ejercer dicha tarea. Si no piensen por un momento en el caso de lo que está ocurre en el Gobierno de Puerto Rico. Donde tantas personas dieron su voto al ( Hon. Gob. Don Luis Fortuño) Gobernador y ahora se cuestionan si ejercieron una buena decisión o no.
Sin embargo si nos vamos a la parte biológica hemos aprendido que hay unas cosas que se adquieren a través de la herencia. Pero yo me pregunto ¿cómo aplicó esto a la realidad del mundo empresarial o político? Porque si fuera así todos los grandes líderes, hubiesen tenido hijos también lideres y no necesariamente es así.
Como conclusión de esta controversia citaré un abstracto del artículo del Dr. Edelberg, que muestra unas conclusiones muy interesantes presentadas por Jonathan Doh, Learning & en Education. Marzo de 2003. Estas son las siguientes:
“Las cualidades innatas del liderazgo no se pueden enseñar o desarrollar. Aun
cuando pudieran «refinarse» por medio del aprendizaje, existen límites a lo que
pueda lograrse por medio de la enseñanza formal;
La mejor manera de desarrollar las habilidades que no entren en la categoría de
Innatas es a través de un programa educacional práctico que implique vivir
experiencias personales;
Las opiniones están divididas con respecto a si los líderes de una organización
pueden llegar a ser buenos entrenadores para desarrollar habilidades de
liderazgo en sus subordinados. Algunos opinaron que los líderes, en esta
actividad, sólo transmiten experiencias personales
La relación entre liderazgo y enseñanza es importante. Una característica
destacada de los líderes es su habilidad para imbuir a los integrantes de una
organización de una mentalidad de aprendizaje. Los líderes efectivos poseen un
determinado punto de vista apreciado como un foco de enseñanza que define
qué espera que logre la empresa y cómo lo logrará.”
En realidad la decisión final es suya pero antes de irme como perito en el área de la conducta les invito a explorar lo que es el Examen Psicométrico PDA que según Rormoser es un examen que presenta: “la forma más sencilla y efectiva de conocer el perfil conductual de un empleado. Este test está validado científicamente y permite conocer el estilo gerencial de cada persona, su capacidad de liderazgo, su forma de comunicarse, de tomar decisiones, de relacionarse con su entorno, de trabajar en equipo y su estilo de ventas. De esta forma podremos detectar líderes dentro de la empresa o entre los aspirantes a nuevos puestos laborales.
Así que ya tienen una forma más segura de saber si los empleados que están contratando son líderes. Así que le invito a expresarse y dejarme saber que usted piensa ¿los líderes nacen o se hacen?
